lunes, 22 de abril de 2013

OBLIVION: NADA ES LO QUE PARECE


Título original: Oblivion. Dirección: Joseph Kosonsky. Guión: Joseph Kosinsky, Michael Arndt, Karl Gajdusek (cómic: Joseph Kosinsky, Arvid Nelson) Fotografía: Claudio Miranda. Música: Anthony Gonzalez, Joseph Trapanese, M.8.3. Intérpretes: Tom Cruise, Morgan Freeman, Nicolaj Coster-Waldau, Olga Kurylenko, Zoe Bell, Melissa Leo.

Estamos en el año 2073, nuestro planeta está inhabitable por la contaminación y la destrucción provocada por una guerra en la que se venció a los alienígenas y que tuvo lugar 60 años atrás. Los supervivientes humanos inician una nueva era en un satélite de Saturno y en la Tierra unos dispositivos se encargan de recuperar los recursos naturales que aún se pueden aprovechar. Jack Harper y su compañera trabajan para que todo este proceso esté bajo control así como para neutralizar algún contraataque alienígena. La llegada de una extraña nave hará que Jack se replantee el sentido de su existencia...
 La premisa de esta película de ciencia ficción es a priori  bastante atractiva. Evidentemente, pronto se va averiguando que vamos a jugar al "nada es lo que parece" y que durante su desarrollo vamos a tener más de un giro o sorpresa en su argumento. A la hora de deshacer todo el entuerto en el que  te meten sus autores encontraréis más de una trampa y alguna que otra duda, pero más allá de su cuestionable desarrollo, la idea de base tiene su gracia, y al final eso es lo que queda. 

Lo mejor de "Oblivion", su empaque visual

 Otra cosa es combinar la ciencia ficción con el entretenimiento y en eso "Oblivion" no termina de cuajar y la  mezcla mantiene el interés, pero no llega a sobrecoger como pretende. Menos mal que su acompañamiento visual con la fotografía del oscarizado Claudio Miranda (La vida de Pi), su potente banda sonora y los impresionantes diseños creados para el film, hacen que la experiencia no se eche a perder del todo.

Morgan Freeman y Nicolaj Coster-Waldau, algo desaprovechados en el film.

 Llaman la atención algunos detalles que conectan con el referente por excelencia: "2001: una odisea en el espacio". Esa especie de Hal 9000 que aquí se llama Sally o alguna de sus escenas del tramo final, harán caer a más de uno en las casi siempre odiosas comparaciones.
 En definitiva, una película que se deja ver pero que recurriendo al chiste fácil, corre peligrosamente el riesgo de hacer honor a su título y quedar... En el olvido.





CALIFICACIÓN: 5

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