lunes, 11 de febrero de 2013

EL TURBULENTO VUELO DE DENZEL WASHINGTON


Título original: FLIGHT. Dirección: Robert Zemeckis. Guión: John Gatins. Fotografía: Don Burgess. Música: Alan Silvestri. Intérpretes: Denzel Washington, Kelly Reilly, Don Cheadle, Bruce Greenwood, John Goodman, Melissa Leo.

Haciendo un símil recurrente y bastante facilón se podría decir que "El vuelo" tiene un buen despegue, y no solamente por la excelente secuencia aérea que origina la trama, sino por la muy bien elaborada  presentación de sus personajes. Este tercio inicial capta fácilmente al espectador con una historia atractiva en la que Zemeckis parece alejarse de sus éxitos comerciales de consumo amable. "El vuelo" no es una película de catástrofes, es un drama donde el peso de su argumento recae sobre unos protagonistas sumidos en adicciones y cuyas vidas sí son una auténtica catástrofe. Este toque de incomodidad tan interesante se va diluyendo a medida que avanza su metraje por un cine más convencional, casi rozando el telefilm de sobremesa. La película se va dejando por el camino personajes a los que inicialmente  había concedido mucha importancia, como es el caso del interpretado por Kelly Reilly, que queda totalmente desdibujado. Del mismo modo, abre alguna que otra puerta sin rematar el asunto convenientemente. Todo esto hace que la película se disfrute a medias y que, por tanto, sorprenda negativamente su candidatura al Oscar al mejor guión. 

Washington con la británica Kelly Reilly (Sherlock Holmes, Orgullo y prejuicio, Mrs Henderson presenta y Una casa de locos)

Es cierto que el vuelo (volvemos al símil poco ingenioso) remonta en su tramo final con un giro en su argumento muy convincente. Si hubiera terminado en ese momento, el resultado habría sido notable, pero es en el último minuto donde la película se carga de un plumazo todas las virtudes que había conseguido transmitir: un epílogo edulcorado e innecesario que parece un añadido postizo para que esta historia de héroes redimidos sea lo más complaciente posible... Como si Zemeckis, tras cruzar la línea del cine más arriesgado, volviera al estilo de su exitoso "Forrest Gump".
 Irregularidades aparte, y después de 138 minutos que consiguen entretener, lo que realmente resulta destacable es la gran labor de Denzel Washington, él sí que consigue un vuelo satisfactorio de principio a fin. Pasable.



CALIFICACIÓN: 5-6



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